Cuando se pretende hacer un estudio sobre las facultades cognitivas humanas, por ejemplo: el lenguaje, la atención o la memoria; los científicos cuentan con la buena fe de las personas que se apunten como voluntarios. Estos grupos, por lo general, tienden a ser muy homogéneos y muchas veces no representan lo que ocurre en la realidad. La internet ha sido de gran ayuda para estas investigaciones porque ha permitido llegar a un mayor grupo de personas, sin que sea un impedimento las barreras geográficas o el idioma. Sin embargo, la internet no permite hacer estudios donde se requiere de precisión y rapidez, por ejemplo, cuando se pretende cuantificar la velocidad de respuesta ante un determinado estímulo. Un grupo de científicos liderados por el ingeniero Stephane Dufau del Centro Nacional de Investigación Científica de Francia, desarrollaron una aplicación gratuita para el iPhone, el iPod y el iPad que permitía realizar el clásico estudio psicolingüístico conocido como el prueba de d